Frases sobre Madrid - Aprede español

Puede que Madrid no tenga la historia y tradición de otras ciudades españolas (su importancia histórica comienza en 1561, cuando el rey Felipe II convierte a la ciudad en la capital del reino) pero en estos pocos siglos ha atraído muchos pensamientos y ha inspirado muchas citas. Vamos a recordar algunas.

“De Madrid al cielo”. Es un refrán que todo madrileño ha dicho alguna vez en la vida ya sea con el sentimiento verdadero de referirse a una ciudad divina; o cierta ironía al mencionar que el estrés de la gran ciudad nos va a matar un día. Se le atribuye a Luis Quiñones de Benavente, autor del Siglo de Oro.

“Yo salí de Granada, y vine a ver, la gran villa de Madrid, esta nueva Babilonia, donde verás confundir en variedades y lenguas el ingenio más sutil” decía el genial dramaturgo Pedro Calderón de la Barca. Lo genial de esta frase es que tanto podría ser una alabanza como una crítica al bullicio de la capital.

“Adiós, dije a la humilde choza mía; adiós, Madrid; adiós tu Prado y fuentes, que manan néctar, llueven ambrosía” fue lo que escribió Cervantes en “Viaje al Parnaso”. Pese a los disgustos que le dio, Cervantes parecía amar a Madrid: un sentimiento al que muchos madrileños de hoy se apuntarían.

“Madrid; que no hay ninguna villa, en cuanto el sol dora y el mar baña más agradable, hermosa y oportuna, cuya grandeza adorna y acompaña la Corte de los Césares de España”. No vamos a añadir más a esta épica y potente frase de Lope de Vega.

“Madrid es una ciudad preciosa, pero espero que encuentren pronto el tesoro” fue lo que dijo en ingenioso actor Danny DeVitto cuando vio algo que los madrileños llevan sufriendo prácticamente desde 1561, el hecho de que siempre haya algo que reparar o en obras.

“Madrid, en cualquier caso, es un sitio curioso. No creo que llegue a gustarle a nadie cuando se va por primera vez. No tiene la catadura que uno espera que va a tener España. No es pintoresco. Y, sin embargo, cuando se conoce Madrid, es la más española de todas” escribió Ernest Hemingway. El gran viajero experimentó algo parecido a lo que sienten muchos turistas que vienen a visitarnos, que lo hacen sin muchas expectativas pero al final se encuentran con una bonita capital europea.

“La gente en Madrid andaba de otra manera, miraba, se vestía y hablaba de otra manera, con una especie de desgarro”. Estos renglones escritos por Carmen Martín Gaite podrían seguir aplicándose a día de hoy. Los madrileños siempre se mueven como si tuvieran prisa por llegar: nos gusta pensar que es porque siempre hay algo que hacer en la ciudad y no queremos llegar tarde.

¿Qué mas se puede decir de Madrid? Sin duda muchísimas cosas más, y esperamos que en una futura ampliación de este artículo haya alguna de las vuestras. Sólo nos queda despedirnos con un enorme “Bienvenidos a Madrid”.